Overkill es una banda a la que ya le había perdido esperanza. En mis años lucrativos cuando chambeaba en una cafetería, siempre que era quincena me lanzaba al Mix Up más cercano (por no conocer El Chopo o unos puestos por allá en Pericoapa) y me echaba una dosis de 2 ó 3 discos utilizando mi media quincena. Casi todas mis compras eran al azar, si la portaba me gustaba era un hecho que estaba interesado.
Total, algo había escuchado de Overkill y ahí estaba Relix IV. Sin dudarlo, con una portada semi-extraña decidí comprar ese álbum y... o por Odín, Alá, Dios y quizás Maradona... quedé TAN decepcionado de mi compra que rara vez recuerdo que tengo esa pequeña mugre entre mi colección. Todo de ese disco, a excepción de la última canción es aburrido y tedioso. Realmente pensar en escuchar ese disco me causa pesar en mi ser y hasta indigestión. De a ratos pongo 'Old School', pero porque es una rola de chiste... es decir, la mejor canción del disco es un chiste, háganme el chingado favor.
Así que desesperanzado, nunca más mencioné a Overkill o seguí con su material. Cuando hace algo como dos meses decidí comprar 'Immortalis' de ellos, siendo que había escuchado una canción del último disco y me había gustado muchísimo, había decidido darle una segunda oportunidad...
Pero Odín es grande y el disco tenía una rajada como de 2 cm haciéndolo inútil frente a cualquier estéreo, discman o computadora (aunque déjenme decirles que mi juego de Warcraft corrió así como durante año y medio...) y tuve que devolverlo y conseguir otra cosa de otra banda.
El miércoles pasado vino Napalm Death y Suffocation a México y... no fui. ¡Pero estuve afuera! Intentando hallar un tema a mi ensayo fotográfico, que fracasó miserablemente. Cabizbajo, decidí ver los discos que tenían y ver si algo me interesaba... total, ahí estaban 2 copias de Ironbound de Overkill y decidí chutarmelo porque ya había escuchado la rola de 'Endless War'.
¡O por el amor del creador! ¡Qué disco TAN bueno! Nada que ver con mis experiencias pasadas, en el momento en que lo puse algo hizo click y sólo pude menear la cabeza mientras pensaba y le decía a Mike: "¡Qué riffs tan... RIFFados!" y es que no hay mejor frase para describir este disco. La rola que inicia todo este asalto agresivo a los tímpanos es 'The Green and Black', una rolita de 8 minutos que se pasan como agua. Es como si de repente te estrellaran la cabeza contra un muro de contención y gozaras mientras sucede, realmente excelente.
Y es que esa primera canción describe muy bien el contenido del álbum, pues no habrá momentos lentos, de este disco pueden esperar violencia, agresión, poderosos riffs y momentos grandiosos que mantendrán su cuello moviéndose de manera involuntaria.
Basta con escuchar los coros de 'Bring Me The Night' o 'Give a Little' para tenerlos pegados todo el santo día, la violencia de 'Endless War' y el bajo en 'The Head and Heart'. Simplemente es un disco que vale la pena, aunque al parecer no toda la discografía de la banda lo haga. Este álbum es un MUST si quieres experimentar con esta banda.
Enérgico, violento, rápido y agresivo... así es este disco. Con todo y que el vocalista no me encanta, pero esta vez no tengo queja alguna.
Por desgracia, decae mucho al final ya con 'In Vain', que aunque me ha costado trabajo apreciarla es buena, aunque la que le sigue 'Killing for a Living' es aburrida y quizás no le hace honor a su nombre. Sin embargo no hay canción que me quiera saltar al escuchar este discazo. De mientras pues a esperar 'Coat of Arms' que sale el 21 de mayo.
Por si las moscas, aquí les dejo su video de 'Endless War'.
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