Vengo regresando de ver a Amon Amarth en vivo y sólo puedo decir: Wow... Eso y un gran OUCH por mi cuello que en estos momentos me está matando. Y no es que haya tomado viva propia y me esté apuñalando con un cuchillo (no podría estar escribiendo esto, pues estaría luchando por mi vida) sino que mover la cabeza tanto y tan fuerte fue agotador. Pero no quedó de otra, con intros tan arrolladores, ¿cómo no iba a quedar así?
A sólo unas cuantas cabezas del escenario, con mucho gusto puedo decir que ha sido uno de los mejores conciertos a los que he asiistido en algunos años, claro, sin mencionar que hace 1 año fue el de Helloween con Gamma Ray, el cual estuvo más que excelente, pero aún así, los suecos no se quedan atrás por nada del mundo.
Les abrió una banda mexicana llamada Imperio, pero el nombre fue lo único que pude captar, pues ni idea del nombre de las rolas, pero eso sí, era un death metal bastante duro, pesado, pero sin dejar de lado la melodía y lo épico. Buena banda de Melodic Death, que dejó con un buen sabor de boca a todos los presentes sedientos del evento principal: El acto vikingo de Amon Amarth.
Algo que estuvo excelente fue lo rápido de la transición entre bandas, siendo que se tardaron unos 20 minutos a lo mucho en adinar y acomodar todo para que Amon Amarth tocara, cosa que muchas veces se tardan años en lograr, pero después de una pequeña espera, las luces se apagaron y un hombre barbudo y de mata güera sale de entre las sombras para abrir el concierto.
No se pierde tiempo, y pronto se escuchan los poderosísimos riffs de los guitarristas y la profunda y gutural voz de Johan Hegg. No les voy a mentir, siendo que no conozco todas sus rolas, no me sé muchos de los nombres y apenas recuerdon con cual abrieron, pero sólo sé que causó euforia entre todos los metaleros reunidos y pronto se dieron a conocer saltos, cuernos al aire, uno que otro codazo y empujón, pero que no importaron, pues el chiste era mover la mata y disfrutar de la brutalidad musical de estos suecos.
Una de las mejores rolas de la noche, definitivamente fue Guardians of Asgaard y por supuesto, la que yo más esperaba que tocaran: Valhalla Awaits Me. Nononononono... qué rolón, y la banda la tocó idéntica. Excelente les salió, además de una energía que en verdad daban ganas de tener una espada y estar en medio de una batalla medieval y como soundtrack esta rola.
Uno de los grandes 'plus' de la noche fue la actuación de Johan Hegg. Increíblemente bajo la fachada de un vikingo duro y sediento de sangre, ha sido de los 'frontman' más amigables que he visto. El cuate moviendo la cabeza, riendo, enseñando la lengua, comunicándose con la audiencia... increible el sujeto. De las mejores partes fue cuando toda la banda se acercó a hacer un pequeño brindis con sus respectivas chelas en la mano y tomársela a nuestra salud.
Excelente banda, un gran concierto y por supuesto, la calidad se mide con los días en los que a uno le duele el cuello... y creo que será un dolor que me va a durar toda la semana...
"Sword in my hand, axe by my side, Valhalla awaits me... when I die!"
A sólo unas cuantas cabezas del escenario, con mucho gusto puedo decir que ha sido uno de los mejores conciertos a los que he asiistido en algunos años, claro, sin mencionar que hace 1 año fue el de Helloween con Gamma Ray, el cual estuvo más que excelente, pero aún así, los suecos no se quedan atrás por nada del mundo.
Les abrió una banda mexicana llamada Imperio, pero el nombre fue lo único que pude captar, pues ni idea del nombre de las rolas, pero eso sí, era un death metal bastante duro, pesado, pero sin dejar de lado la melodía y lo épico. Buena banda de Melodic Death, que dejó con un buen sabor de boca a todos los presentes sedientos del evento principal: El acto vikingo de Amon Amarth.
Algo que estuvo excelente fue lo rápido de la transición entre bandas, siendo que se tardaron unos 20 minutos a lo mucho en adinar y acomodar todo para que Amon Amarth tocara, cosa que muchas veces se tardan años en lograr, pero después de una pequeña espera, las luces se apagaron y un hombre barbudo y de mata güera sale de entre las sombras para abrir el concierto.
No se pierde tiempo, y pronto se escuchan los poderosísimos riffs de los guitarristas y la profunda y gutural voz de Johan Hegg. No les voy a mentir, siendo que no conozco todas sus rolas, no me sé muchos de los nombres y apenas recuerdon con cual abrieron, pero sólo sé que causó euforia entre todos los metaleros reunidos y pronto se dieron a conocer saltos, cuernos al aire, uno que otro codazo y empujón, pero que no importaron, pues el chiste era mover la mata y disfrutar de la brutalidad musical de estos suecos.
Una de las mejores rolas de la noche, definitivamente fue Guardians of Asgaard y por supuesto, la que yo más esperaba que tocaran: Valhalla Awaits Me. Nononononono... qué rolón, y la banda la tocó idéntica. Excelente les salió, además de una energía que en verdad daban ganas de tener una espada y estar en medio de una batalla medieval y como soundtrack esta rola.
Uno de los grandes 'plus' de la noche fue la actuación de Johan Hegg. Increíblemente bajo la fachada de un vikingo duro y sediento de sangre, ha sido de los 'frontman' más amigables que he visto. El cuate moviendo la cabeza, riendo, enseñando la lengua, comunicándose con la audiencia... increible el sujeto. De las mejores partes fue cuando toda la banda se acercó a hacer un pequeño brindis con sus respectivas chelas en la mano y tomársela a nuestra salud.
Excelente banda, un gran concierto y por supuesto, la calidad se mide con los días en los que a uno le duele el cuello... y creo que será un dolor que me va a durar toda la semana...
"Sword in my hand, axe by my side, Valhalla awaits me... when I die!"
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